transbordadorLúxor

Lúxor está distribuido a lo largo de las dos orillas del Nilo. En el lado oriental está la ciudad propiamente dicha, el templo de Lúxor, Karnak y los hoteles. En el lado occidental están los principales lugares de interés: colosos de Memnon, el templo de Ramses III, valle de las reinas, Deir el Medina, Ramesseum, Deir el Bahari, valle de los reyes y tumbas de los nobles. Estos lugares están dispersos, distando unos de otros de uno a tres kilómetros. Existen varias maneras de visitar este lado: la más cómoda y rápida es contratar un taxi para todo el día. También alquilando una bicicleta o tomando diferentes taxis para cada parada, pues hay mucha movilidad. Dada la amplitud del lugar, calculamos dos días para una visita medianamente intensiva. El primer día lo dedicamos al templo de Ramses III, Deir el Medina, el valle de las reinas y el Ramesseum.

Para cruzar al lado occidental se toma un transbordador en el embarcadero situado frente al templo de Lúxor por 2 LE. Ya en el otro lado, se toma un colectivo hasta el quiosco de venta de entradas, donde hay de sacar todas las del día. Desgraciadamente, no se puede visitar la tumba de Nefertari. Es un contratiempo duro pues se trata de una de las tumbas más bellas del valle.

Andando desde el quiosco, se llega al precioso templo de Ramses III o Medinet Habu donde destacan los relieves muy marcados y la pintura original de los adornos del templo y los capiteles de las columnas. Madinet Habu Medinet Habu

Tumbas de los artífices

En taxi llegamos a la zona de Deir el Medina donde están las denominadas tumbas de los artífices. Primero visitamos el templo de Hathor y Maat de la época ptolomeica que tiene unos excelentes relieves con diferentes dioses en posición sedente decorados con los colores originales. El guarda me dice con mucho sigilo, que puedo hacer fotos con discreción, de lo contrario su vida corre peligro. Agradezco su amabilidad con una propina.

Diosa Maat en Deir el Medina

Templo de Hathor y Maat en Deir el Medina

Templo de Hathor y Maat en Deir el Medina

Después vamos a la tumba de Inherkhau o tumba del capataz (reinados de Ramses III-IV) que tras unas escaleras muy pronunciadas se accede a una cámara muy decorada con escenas familiares y de distintos ritos sagrados como el de la momificación con Anubis. Aquí se muestran algunas imágenes descargadas del Ministerio Egipcio de Turismo.

Tumba de Inherkhau

Tumba de Inherkhau Anubis con Inherkhau

Inherkha con Kheper, Thoth e Isis en la Barca Sagrada

Posteriormente se visita la tumba de Sennedjem (reinado de Seti I) que se descubrió intacta. Tiene diferentes escenas de Sennedjem con su esposa haciendo ofrendas a los dioses, trabajando en el campo y escenas del libro de los muertos muy bien conservadas.

Anubis en el rito de preparación de la momia

Tumba de Sennedjem

Tumba de Sennedjem

Una de las más interesantes es la tumba de Pashedu de la época de Seti I (XIX dinastía). Para esta tumba se saca una entrada aparte y está muy decorada. Tiene un arco con dos imágenes de Anubis a ambos lados y la imagen de Pashedu bebiendo debajo de una palmera. En otra aparece con su mujer e hijo en la barca sagrada hacia el más allá. También otra con Osiris, un ojo de Horus y debajo Pashedu. Con una pequeña propina hago una foto del arco. Intentamos buscar otras tumbas pero están cerradas.

Tumba de Pashedu

Pashedu esposa e hijo Diferentes dioses en la tumba de Pashedu
Tumba de Pashedu Tumba de Pashedu

Al ver que nos va a sobrar tiempo nos dirigimos al quiosco de nuevo a sacar la entrada del Ramesseum, y andando un km llegamos a éste. Está bastante roto, pero aún quedan unas cuantas columnas osiríacas y un gigante Ramses II de 17 m y 1000 toneladas destrozado. No es tan bonito como el de Ramses III.

Ramesseum

A la entrada del Ramesseum hay un restaurante donde comemos el menú del día: arroz, berenjenas, tomate y kofta. Desde aquí un taxi nos lleva al valle de las reinas.

Valle de las reinas

La tumba de Nefertari está cerrada para evitar que se estropee la pintura de las paredes y tras sacar un nuevo ticket nos hemos de contentar con la visita de 3 tumbas de príncipes. En primer lugar, la de Titi que es regular. Sin embargo, la del príncipe Amón-her-Khopechef está considerada como una de las mejores tumbas del valle de las reinas. Fue un hijo de Ramses III fallecido a los quince años, pudiendo verse pinturas de un azul muy intenso y cuidados relieves del príncipe que aparece peinado del modo característico de un joven de su época, acompañado de su padre haciendo ofrendas a Ptah e Isis. En otra aparece junto a Khnum. Al final hay un sarcófago y una urna con un feto.

Tumba de Kamaust. Ramses III junto a Anubis El príncipe con Khnum en la tumba de Amon-her-Khopechef

Finalmente, la tumba de Kamaust, otro hijo de Ramses III, es también excelente con unos colores todavía mejores si cabe.

Tumba de Kamaust Tumba de Kamaust. Ramses III haciendo ofrendas a Thoth

Al acabar, como el taxista no nos quiere llevar por 5 LE nos vamos andando hasta el quiosco de venta de entradas donde tomamos un colectivo hasta el transbordador.

Andando, que es lo nuestro, vamos a la estación a sacar los billetes de tren-cama para Cairo para dentro de tres días. Vale 41 euros por persona, pero lo más sorprendente es que se paga en euros y te devuelven en euros. He de socorrer a un compatriota que no tiene ni dólares ni euros para pagar el tren.

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