Almedijar: Mosquera

Jueves, 28 de diciembre de 2006

 

José Luis A. – Roberto – Manolo – Gustavo – Alicia

Alex – Jordi – Ezequiel – José Luis M. – Luis M.

María – Santi – Ana – Hector – Joaquín

Zona: Espadán         Tiempo estimado: 2 horas y media

Inicio: Almedijar, en la carretera que sube a Ibola a 3,5 km del pueblo.

Acceso: Desde Segorbe, pasamos Almedijar y seguimos hacia Ahín, por la carretera del collado de Ibola. Pasamos el entrador de Mosquera y medio kilómetro más arriba veremos una explanada a la izquierda junto a la carretera para dejar los coches.

Dificultad: Media-alta. La senda no siempre es buena, hay trozos estrechos y pedregosos y dos desniveles fuertes.

En marcha...

Ruta: Desde la explanada donde quedan los coches tomamos la carretera hacia arriba, dirección Aín, durante 300 m hasta una curva a la derecha donde veremos dos sendas, una a la izquierda, que baja al barranco de Almanzor y otra, menos visible, que sube por la ladera a la derecha de la carretera.

Cogemos la senda que sube por la derecha, pasamos junto a una depresión del terreno de la erosión y llegamos a un pequeño collado donde la senda se acaba. Cruzamos el collado y nos lanzamos montaña abajo, sin camino, por una ladera bastante empinada donde no faltan los resbalones y alguna que otra culada… por suerte el terreno está limpio de maleza.

En unos minutos llegamos a la pista de Mosquera, que seguimos a la izquierda hasta el caserón abandonado. A la izquierda tenemos una senda marcada como PR que es por donde bajaremos más tarde. Ahora seguimos recto, hacia la cabecera de Mosquera por una estrecha pista que va remontando el barranco.

Justo en un punto en que la pista cruza el cauce del barranco vemos a la derecha una estrecha senda por donde subimos en un cómodo y bonito zigzag hasta llegar a otra senda que atraviesa en horizontal. Tomamos aquí a la izquierda y seguimos por unas lomas para bajar seguidamente al Collado del Alubiar, que delimita el barranco de Mosquera por el este.

Desde el Collado del Alubiar seguimos hacia la izquierda por una senda que baja a Mosquera, pero a unos 20 metros cogemos una senda muy estrecha a la derecha (justo en la primera curva de la senda que baja) y comenzamos una larga subida hasta el Alto del Pinar, ya en el cordal superior que delimita con el barranco de Caridad, donde está Aín.

Una vez en el cordal, lo seguimos a la derecha, por una zona bastante llana, a lo largo de la Sierra de Bovalar, en dirección a las antenas del Puntal del Aljub, pero no llegaremos tan lejos. Remontamos un par de colinas y llegamos al Collado de Bellota, donde cogemos a la izquierda un sendero que baja en diagonal al Coll de Barres, que separa Aín de Eslida.

De aquí tomamos el GR7 y bajamos por la vertiente de Aín hasta una pista que seguimos a la izquierda hasta que se acaba. Ya se nos ha hecho de noche y la luna empieza a brillar con fuerza. Comienza aquí un sendero que sube por la izquierda, pasa junto a una caseta en ruinas, atraviesa la ladera en diagonal a la derecha y llega al Collado de Piedras Blancas, donde pasamos de nuevo a la vertiente de Mosquera.

Comenzamos la bajada ya de noche cerrada, con ayuda de las frontales, por el frondoso bosque de alcornoques que nos roba la poca luz de la luna. En estas bajadas nocturnas hay que tener cuidado con los tobillos, pero en este caso el problema fue una genista que atinó a pinchar en el ojo de María... bueno, al final todo quedó en un susto.

Seguimos bajando hasta llegar de nuevo al caserón de Mosquera y tomamos la pista a la derecha que en unos minutos nos lleva al colladito sobre el barranco de Almanzor, de ahí a la carretera y enseguida a los coches. Hace frío y ya llevamos casi una hora a oscuras. Hoy apetece más un “colacao” caliente que cerveza, aunque siempre están los incondicionales.

Las fotos de la jornada

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