Gestalgar

Alicia vuelve a nacer..:!!!

Jueves, 24 de mayo de 2007

 

José Luis A. – Roberto – Gustavo – Alicia – Guillem

Jordi – Ezequiel – Luis M. – Santi – Juan

Marian – Pablo S. – Pilar – Javi

Zona: Gestalgar      Inicio: Junto al rio Turia, en la zona de baño del pueblo.

Acceso: Desde Lliria, por Pedralba.    Tiempo estimado: 2 horas     Distancia: 15,5 km

Dificultad: Media. Recorido variado con tramo acuático por barranco. Poco desnivel.

En marcha...

Ruta: Para hoy teníamos previsto un recorrido sencillo, con poco desnivel y con posibilidad de baño… todo ello se cumplió, y todo hubiera ido bien si no hubiera sido por el susto que nos dio la vicepresidenta hacia el final del recorrido. Menos mal que todo quedó en eso… un buen susto.

Salimos de Gestalgar cruzando el río Turia, por la pasarela que hay junto al pueblo, y seguimos a la derecha, río arriba, por una pista forestal. Ha llovido y parte del camino está inundado. Llegamos enseguida a la Fuente del Morenillo, donde tenemos el primer baño.

Desde aquí seguimos a la derecha por el PR-cv 290 en dirección al balneario de Chulilla. La pista se transforma en senda y seguimos subiendo hasta llegar a espaldas de la puntiaguda Penya María. Dejamos primero un sendero a la izquierda (el PR-cv 291) y luego otro a la derecha. Después de un tramo más o menos llano llegamos a un collado sobre la Olla Cherales, transformada en campos de naranjas.

El sendero sigue en suave descenso hacia la derecha, por debajo de las paredes de las zonas de escuela de escalada hasta llegar a una pista que cruza el cauce del río Cherales, pasando antes por la fuente Borreguetas, donde tenemos nuestro segundo baño.

Poco después de cruzar el puente sobre el río dejamos la pista por la derecha. Una senda poco marcada nos conduce a un antiguo canal abandonado que seguimos, bien por dentro, bien por el borde, sorteando los tramos de canal derruidos. A nuestra derecha el río nos llama con su crecido caudal.

Dejamos el canal y bajamos al cauce como podemos, atravesando un cañaveral hasta llegar al agua. Una sucesión de cascadas, rápidos, pozas, toboganes nos aguardan hasta llegar a la enorme poza que hay al final y que nos indica que la desembocadura está cerca. A nuestra izquierda el canal acaba en un salto que alimentaba una antigua central, ahora abandonada y que aún conserva los restos de las turbinas.

Salimos del río por la izquierda, junto a los restos de la central, y un camino ancho, primero en ascenso y luego en bajada, nos lleva al balneario de Chulilla, donde entramos por la puerta trasera, para pasmo de todos los allí presentes.

Seguimos río Turia arriba hasta una antigua presa abandonada con una compuerta reventada. Subimos por una escalera de hormigón, cruzamos el río por la estructura de la presa y bajamos por el otro lado. El camino sigue a la izquierda y luego a la derecha, para seguir río abajo, por un ancho camino entre dos muros que nos recuerda que vamos por dentro de un antiguo canal, el de la presa reventada.

Este ancho camino se acaba junto a otro canal más pequeño que se cuela por una galería en la montaña. El sendero va por la derecha, al pie de los cortados, por una escarpada ladera con algunos pasos aéreos sobre el río Turia. En algunos tramos encontramos cadenas a modo de pasamanos. El río se encañona creando un bonito paisaje de precipicios de roca rojiza y meandros con cañaverales.

Llegando al final de este sendero fue donde Pilar dio la voz de alarma… Alicia había caído. Parece que está bien, pero el nerviosismo de Pilar nos dice que algo ha pasado. Corremos hacia atrás y cuando llegamos nos encontramos a una Alicia temblorosa junto a José Luis.

Ha resbalado, con tan mala fortuna, que ha ido a caer unos cuatro metros, hasta sumergirse en uno de los respiraderos del canal. Sólo un milagro ha evitado ser engullida por el túnel que continúa su camino por dentro de la montaña. Bueno, un milagro, y José Luís, que iba con ella y ha acudido raudo en su ayuda. La ha cogido “por los pelos” cuando la corriente la tenía ya metida dentro del túnel. Con las lluvias, baja mucha agua, y el túnel va casi colmatado.

Pasado el susto continuamos el camino en silencio… cada uno rumiando para sí lo que acaba de pasar y lo que ha estado a punto de suceder. ¡Pobre Alicia…! El susto tardará en írsele del cuerpo.

El sendero se convierte en un cómodo camino junto al río que nos lleva rápidamente al pueblo, y a la derecha, bajando por unas escaleras llegamos enseguida a la zona de baño de Gestalgar, junto al Turia, donde tenemos el coche y donde nos damos nuestro cuarto y último baño… bueno, para Alicia el quinto.

Las fotos de la jornada

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