Zona: Zona Inicio: Sitio Acceso: Acceso. Tiempo estimado: 2 horas y media Dificultad: Media En marcha... Ruta: Salimos hoy, una vez más, de la deshabitada aldea de Benitandús. Cruzamos el puente que nos separa de la carretera y seguimos a la derecha, hacia Tales. Llegando a la altura del embalse, cogemos la visible senda que remonta a la izquierda sobre la carretera. Enseguida entramos en el frondoso bosque de alcornoques, donde encontramos una bifurcación. Seguimos el sendero de la derecha, hacia Suera, y llegamos a un pequeño colladito. Aquí dejamos la senda que comienza a bajar hacia Suera y giramos a la izquierda, para seguir por una senda más estrecha que se eleva rápidamente entre pinos y jarales hasta llegar a lo alto de una loma que domina el paisaje. A la derecha el embalse de Benitandús, a la izquierda Suera y al norte toda la llanura de Onda. Seguimos la senda hacia la derecha (sur) recorriendo a lo largo la loma que separa Benitandús de Suera, hasta llegar a un cruce de caminos, junto a un antiguo molino de cal. Seguimos aquí a la derecha hasta salir a un ancho collado donde cogemos una estrecha senda que sale a la derecha. Después de una travesía horizontal, la senda empieza a bajar en un largo zig-zag y se va adentrando en una zona de espeso bosque. Entramos en la frondosa umbría de Monte Castro. Seguimos la senda en bajada entre pinos con enredaderas. Llegamos a un pequeño claro donde sale una senda a la izquierda. Seguimos de frente. La senda deja de bajar y sigue horizontal entre la frondosa vegetación La senda recorre toda la ladera a lo largo, salvando un par de depresiones de barrancos y sale al final a una pista que viene desde Suera. La seguimos hacia abajo, hasta llegar a unos campos de almendros. Aquí sale una senda a la derecha que después de una corta subida nos lleva al collado por el que pasamos al principio, al iniciar la subida a la primera loma. Desde aquí desandamos el primer trozo de recorrido de la ruta y llegamos de nuevo a la carretera. Bajo nosotros queda el embalse de Benitandús, lleno hasta los bordes, esperándonos con los brazos abiertos para darnos un merecido refresco después de la carrera. Hoy no ha hecho demasiado calor, para lo que nos podía haber caído, y lo sombreado del recorrido lo ha hecho bastante soportable. En cualquier caso el baño apetece y de cabeza nos metemos en el agua del embalse. Las fotos de la jornada Volver a... Inicio – Cronológico - Zonas