Si os habéis dado una vuelta por las páginas que componen mi web os daréis cuenta que la visión cruzada es lo que más utilizo para colocar los pares estéreo que monto en el ordenador.

Cuando uno se acostumbra es una forma sencilla de ver fotografías sin necesidad de ningún tipo de gafas o accesorios. Llega un momento que los ojos no notan el cansancio y puedes mirarlas perfectamente sin acabar con dolor de cabeza.

Pero el sistema tiene un defecto. La foto debe tener unas dimensiones máximas, de tal forma que no debamos cruzar demasiado los ojos y acabar con dolor de cabeza.

Bueno. Pues aquí hay un remedio que nos permitirá fijarnos en los detalles de una foto respetando las dimensiones de la pantalla.

Cojamos una foto estéreo tal como ésta:

Los árboles son nuestra debilidad (digo nuestra porque la foto es de María José). La tridimensionalidad de las ramas y los frutos nunca puede ser captada con una sola fotografía.

La foto ha sido escaneada a 300 ppp, lo que nos da una resolución de 2316 * 1737 pixeles, y mira por donde la foto que os muestro arriba sólo tiene 533 * 400 pixeles, lo que permite que en una pantalla con resolución de 800 * 600, se vea perfectamente con los ojos cruzados, en detrimento de la resolución. Hemos tenido que reducir demasiado las dimensiones de la foto, por lo que hemos perdido los detalles.

No hay que desesperar. Vamos a montar sólo parte de la imagen y veremos el resultado:

Estas imágenes eran de 1198 * 404 pixeles, es decir, una octava parte de la original y se han reducido a 533 * 179 para que se vean bien. Podríamos hacer lo mismo con todos los trozos que nos parezcan significativos.

Como aún hemos tenido que reducir el original, podríamos seguir con el zoom:

Esta última imagen era de 668 * 220 pixeles y la hemos dejado así. Ya no podríamos ampliar más, pero sí podríamos buscar porciones de foto significativas.

Veamos otro ejemplo, esta vez con la flor de un cactus:

Foto inicial:

Zoom 1:

Zoom 2:

(Esta página ha sido realizada el 10 de Noviembre de 2001)